· Por Bebida Viva
5 formas de mejorar tus mañanas
Estamos a muy poco de cerrar el año (específicamente faltan 6 lunes para cerrar el año, ¡una locura! ¿no?) y con ello, llega una sensación que nos pasa a todos y es “ya mejor el siguiente año” ¿A ti también te pasa? Cuando las mañanas se vuelven más pesadas, cumplir metas ya no es tan prioritario como lo es terminar el año a como dé lugar y una rutina perfecta parece imposible.
Pero spoiler alert: tener una mejor mañana no es una receta perfecta. Es tomar decisiones conscientes, pequeñas e inteligentes que te ayuden. Pequeños hábitos, que no te quiten energía pero sí hagan una diferencia en tu día.
Si tu quieres mejorar tus mañanas, de forma real, no con recetas mágicas de Tik Tok, aquí te paso 5 formas de mejorar tus mañanas.
1. No te exijas una rutina perfecta de Tik Tok (ni una irreal que conste de 50 pasos)
En redes sociales todo se ve impecable y perfecto: gente que se levanta radiante, medita 20 minutos, hace journaling perfecto, yoga, café estético y lectura antes de las 7:00 am.
La realidad es que no necesitas nada de eso.
Está bien elegir acciones conscientes pequeñas, cosas que disfrutes y que además tengan beneficios comprobados. Por ejemplo:
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Prepararte un desayuno nutritivo que sí te antoje. No necesariamente desayunar un café, pero si unos pancakes, huevito, overnight oats, un sandwich.
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Tomarte unos minutos para arreglarte para ti. Como dice Walter Riso, el amor propio también se refleja en cuidarte y arreglarte para ti misma, no para cumplir expectativas externas.
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Servirte un café que ames. No tiene que ser un café, puede ser un matcha, un té, un vasito de agua fría, jugo verde, tu kombucha. Lo que te de paz.
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Abrir tus cortinas para que entre luz solar y tu cuerpo entienda que el día ya empezó.
Tu rutina no tiene que ser digna de TikTok para ser valiosa.

2. 10 minutos sin pantallas
Sí, esto tiene una razón de ser. No te voy a pedir algo imposible cómo evitar el celular una hora (aunque estaría increíble), pero 10 minutos sí son alcanzables.
Levántate, abre tus cortinas, respira, toma agua, reconoce tu espacio y asimila que estás empezando un nuevo día.
Muchas veces lo primero que hacemos es desbloquear el teléfono… y de ahí ya nos fuimos a redes sociales, mails, pendientes, redes, comparaciones y estrés antes incluso de levantarnos de la cama.
Regálate esos 10 minutos para ti.

3. Activa tu cuerpo (a tu manera)
No tienes que ser la persona que se levanta a las 5 am a correr 10 km.
El movimiento es bueno, sí, pero puede ser mucho más sencillo de lo que imaginas:
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Primero, quizás unos estiramientos en tu cama ligeros.
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5 minutos de movilidad suave al pararte de tu cama. Estira tus brazos, tus muñecas, tu cuello.
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Mojarte la cara y sacudir un poco el cuerpo para despertar energía.
Se trata de decirle a tu cuerpo: “Estamos empezando, vamos juntos.”
Ese pequeño movimiento cambia muchísimo tu ánimo durante el día.

4. Rompe tu ayuno de forma inteligente
Aquí viene mi parte favorita: un shot de kombucha en ayunas es una gran forma de arrancar. Pero ¿por qué lo digo? Porque es ligero, delicioso, fácil y está lleno de probióticos naturales que ayudan a despertar tu digestión.
¿Es la única forma de romper el ayuno? No.
¿Es la más deliciosa? Probablemente sí jaja.
Además, te da esa sensación de ritual práctico que no te quita tiempo pero sí te hace bien.
Después de eso, ya puedes continuar con tu desayuno habitual o algo más completo si lo necesitas.

5. Revisa tu día con intención (sin saturarte)
Este punto lo puedes añadir: elegir tus 3 prioridades del día.
No se trata de llenar la agenda, sino de darte claridad mental y ser realista. Habrá días más saturados que otros y eso está bien.
Esto te evita la sensación de ir apagando fuegos todo el día y te da una mini estructura desde la mañana.

Y bueno, a estas alturas del año, lo que menos necesitamos es agregar presión. Mejor regalarnos mañanas más presentes, más amables con nosotros mismos, más reales y más sostenibles. Estos, son los pequeños hábitos o elecciones inteligentes que pueden ser tan pequeñas o tan grandes como tu quieras, que repetidos todos los días, pueden cambiar cómo te sientes… y cómo cierras el año.
Nos vemos en la próxima. Me cuentas si te animas a realizar alguno de estos pasos.